Hoy voy a contar mi experiencia en el Museo Pedagógico de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM, al que he podido ir junto con mis compañeros gracias a la asignatura "Las TIC en la Educación Infantil".
Tengo que decir que la visita me ha encantado y me ha parecido muy interesante y entretenida, ya que a parte de que tenía interés por conocer el museo en sí, he aprendido muchas cosas sobre la evolución que ha sufrido la educación en nuestro país. La verdad es que es recomendable para cualquier tipo de persona, niños, adolescentes, estudiantes, adultos y curiosos, cualquiera que tenga ganas de conocer más sobre la educación y sus cambios evolutivos.
El Museo Pedagógico está situado en una sala al lado de la biblioteca de la facultad de Magisterio Infantil. En la pequeña introducción de cómo surgió la idea de comenzar con este museo, nos comentaron que estaban habilitando esa sala con materiales antiguos de la escuela con la finalidad de que pronto se pueda convertir en un museo para niños.
La charla comenzó con la Ley General de 1970, que fue la primera ley que intentó modernizar la educación, y con una presentación general de los cambios más notables e importantes que ha sufrido la educación, sobre todo los referidos con los libros y la escritura.
Respecto a la Ley General de 1970, decir que en el momento en el que apareció, los niños solían estudiar sólo hasta los 12 años, y a partir de esa edad comenzaban a trabajar.
Entonces se daba en las escuelas una separación por sexos en las aulas (chicas y chicos estaban separados) que se reflejaba en el currículo. Había algunas asignaturas diferentes y específicas según el sexo.
Fue en este año cuando empezaron a aparecer los manuales con imágenes y más grandes que los anteriores, ya que antes estaban escritos en blanco y negro, sin fotografías y con un tamaño reducido. En estos nuevos manuales se empezaron a introducir las unidades didácticas.
En el currículo tenían gran importancia la escritura y la lectura.
Antes se escribía con tinta de pluma y con lápiz, mientras que actualmente existen los bolígrafos, mientras que las plumas han quedado más apartadas, pero ahora ya contienen la tinta cuando se compra. Nos contaron que la pluma de acero en tinta líquida era hecha por el maestro, quien la repartía por los pupitres, los cuales tenían un agujero donde se podía depositar el cuenco de porcelana y que había muchos modelos. Se empleaba para absolutamente todo. Se nos dio la posibilidad de escribir con pluma en un cuaderno nuestro nombre, la verdad es que fue una sensación rara, ya que parecía que se iba a doblar o romper en cualquier momento, pero me gusto la sensación y poder comprobar por mi misma como escribían antes.
En lo referido a las escuelas de ese tiempo, se las llamaba "Escuelas Normales", y también tenían separación de sexo. Podían acudir niños de todas las edades. Hablando de las asignaturas que se impartían, las chicas daban clases de coser y labores de la casa, más dirigidas a lo que se esperaba de ellas en un futuro por aquel entonces. Había escuelas unitarias con niños de todas las edades, sobre todo en los pueblos. Si el pueblo no era demasiado pequeño había una escuela para niños y otra para niñas.
El aprendizaje de la lectura comenzaba más tarde que ahora ya que hasta los 6 años los niños no comenzaban a leer. Lo primero que aprendían era el alfabeto y después se iba aprendiendo por sílabas. Había pocos estímulos visuales y costaba que aprendieran a leer. Dentro de los colegios, las asignaturas fundamentales eran el cálculo, la lectura y la escritura; dándole más importancia a ésta última. Apenas se daba importancia a la historia y a la geografía. Debido a la importancia de la escritura y a la demanda de la sociedad (al no haber ningún otro método de escritura) había una asignatura que era caligrafía. Se aprendían diferentes tipos de letra: la española inclinada o recta, la redondilla francesa, la inglesa, americana, gótica, etc. La tecnología y en general todos los avances que ha habido, han hecho que esta asignatura pierda esta importancia en la escuela, aunque siga impartiéndose. Sobre el cálculo, decir que el contenido era el mismo que el de ahora, sólo que se trabajaba mucho más.

Todas las asignaturas estaban metidas en un solo libro, llamado enciclopedia, que era el instrumento clave de la enseñanza en ese tiempo.
Había tres tipos según la edad del niño: elemental (primer grado, pequeños, de 6 a 8 años), media (segundo grado, medianos, de 8 a 10 años), y superior (tercer grado, mayores, de más de 10 años). Los números de los temas estaban escritos en números romanos y en la parte de historia se exaltaba la época del franquismo. Normalmente se comenzaban las enciclopedias con los temas de matemáticas y religión. El contenido en ellas era muy conciso y organizado (cosa que sinceramente me ha dado envidia, ya que ojalá nosotros hubiéramos estudiado con libros así, porque en mi opinión lo que pude leer estaba muy bien explicado y me gusto mucho). Se nos dio la oportunidad también de observar de cerca y poder leer las enciclopedias para ver sus diferentes apartados: urbanidad, matemáticas, literatura, normas de higiene, juegos, cómo comportarse en la mesa, temas sobre educación, junto con otras muchas asignaturas interesantes e importantes. Por lo que destaco que no solo se aprendían aspectos teóricos, sino que también se enseñaban cosas que les serviría en su vida diaria/cotidiana.
Las escuelas seguían el sistema concéntrico de enseñanza:
- Primer grado: se daba de todo un poco
- Segundo y tercer grado: eran más amplios los contenidos y más completos.
En mi opinión, el hacer estas visita a un museo pedagógico es una buena idea para la etapa de educación infantil, ya que pueden observar y tocar ellos mismos tanto libros como otros objetos antiguos que en otras ocasiones no van a poder conocer, experimentando nuevas experiencias y aprendiendo más sobre nuestro pasado y nuestra educación y sus cambios, dándose cuenta de que no todo ha sido así siempre, y que para llegar a donde estamos, hemos tenido que pasar muchas cosas. Pero en general, vuelvo a repetir que creo que es aconsejable para todo tipo de personas que tengan curiosidad y ganas de conocer y aprender más sobre este tema.
Para concluir esta entrada, dejo una foto de todos los compañeros que fuimos ese día al Museo Pedagógico.
¡Hasta pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario